Casualidades de la Vida
Una de las cosas en las que hago hincapié en las visitas de mi consulta es el que estemos atent@s a esas situaciones en las que parece que la vida nos ofrece un guiño del Universo en forma de «casualidad» o «coincidencia». Es un fenómeno que está descrito en la Psicología moderna (sigo considerando a Carl Jung como un fuera de serie) como Sincronicidad.
No es lo mismo que las situaciones que yo percibo como ya vividas con anterioridad (los clásicos «déjà vu» o «déjà pensé» ). No, el fenómeno al que me refiero es lo que ocurre cuando estás pensado en algo o en alguien y, a continuación, aparece, me llama por teléfono o me doy cuenta de que otra persona comenta sobre ello…
Estoy escribiendo sobre este tema porque ayer me pasó descaradamente y quiero compartirlo con mis lector@s. El caso es que mi amigo Óscar me envió uno de esos archivitos que circulan sin parar en Internet. Ahí abajo lo podéis ver.
Hasta aquí, todo es «normal». Pero hete aquí que termino de leer el mensaje con el archivo ‘.pps’ y me fijo que el amigo Manolo (gracias por tu labor comunicadora), me envió otro mensaje que hablaba sobre el mismo tema, incluso pareciendo que «contestara» o complementara al primero… Se trataba de un artículo que salió en el diario La Voz de Galicia y que podéis leer aquí (es pequeñito, no temáis).
Y es que el tema tiene mucha «miga», pues ha sido una de las razones por las que he decidido saltar a la acción (como la ranita, je-je) y enrolarme junto a un grupo de gente bienintencionada de cara a mostrar a la sociedad de mi tierra navarra que existe la posibilidad de gestionar de otra manera los recursos que poseemos, que no sirve la receta de consumir más de cara a salir de esta crisis aciaga, de la que no sabemos cuándo vamos a salir, ni si vamos a poder salir airosos de ella…
El grupo al que he querido unirme (Partido Verde de Navarra-Nafarroako Berdeak; éste es el blog pues la página web se está construyendo en estos momentos), siendo como he sido una persona que presumía de no militar en ninguna estructura que me dijera qué tenía que pensar, decir, hacer nada que yo no quisiera…, es una estructura (en este momento unificada por la denominación Coordinadora Verde) alimentada por una red de grupos de trabajo, compuestos por personas de todo tipo (militantes, simpatizantes y personas que, en general, apuestan por «otra manera» de hacer las cosas) que generan trabajo en red en temáticas específicas.
Yo, por ejemplo, estoy co-coordinando (junto a una compañera) el grupo de trabajo «Salud Verde«, y nos encargamos de generar los contenidos programáticos respecto al tema «salud» del movimiento político verde de cara a las diversas elecciones que puedan suceder… Esta dinámica se da en todos los grupos de trabajo.
Es una estructura participativa, horizontal, sin jerarquías de poder que dominen o dirijan a las bases hacia presupuestos políticos a los que sólo se pueda responder con un «amén». El programa se nutre desde los diversos grupos de trabajo que pueden ser compuestos, a su vez, por personas interesadas en dar a la sociedad un color de fondo verde, teniendo en cuenta que esto no se basa exclusivamente en ser «ecologistas» en el sentido clásico y literal de la palabra…
Hay un pensamiento verde en cada sector de la sociedad: Salud, Sindicalismo, Economía, Territorio, Cultura, Educación, Energía, Justicia, Administración, Animalética, Informática, Biodiversidad, Ecoféminas, Medio Rural y Agricultura.
El día 28 de Diciembre pasado asistieron a la presentación del Partido Verde de Navarra – Nafarroako Berdeak varios medios de comunicación; pero, al día siguiente, en los dos periódicos de mayor tirada en mi territorio (ver aquí y aquí), salió el mismo titular: «Ni de izquierdas ni de derechas», intentando resumir con esta frase el contenido de esta nueva alternativa política. Evidentemente, esa frase no es un buen resumen para presentarse en una sociedad politizada como la navarra…
En fin, no pretendo soltaros un rollo sobre esta cuestión sino sólo animaros a que, cada un@ en su territorio, en su comunidad, opte por construir alternativas válidas de cara a consolidar una sociedad que respete al ser humano como individuo, con sus libertades; y al planeta como lugar común donde habitamos. Ya ha pasado el tiempo de protestar, de decir «no» a lo que sea, y ha llegado el momento de echar una mano solidaria para construir un mundo mejor.
Vamos…, que las casualidades no existen.
Salud para ti y los tuyos.