Nuevos Proyectos y 2012
No sé (sí lo sé) si está por venir un cambio de ciclo en la organización de la vida del ser humano, al menos en esta parte del mundo, porque en «la otra», los pobres, ya tienen suficiente con intentar sobrevivir en la precariedad de las migajas de Occidente…
Lo que sí estoy viviendo en propia carne (y también lo veo en gente cercana) es que las personas ya no disponen de recursos para invertirlos en terapias que no sean «imprescindibles» (¿qué cosas podríamos valorar como más importantes que sentirse bien?). Antes, se prefiere tirar de Seguridad Social…, o intentar inventar la rueda del apaño para ir tirando, para ir saliendo del apuro.
Esta realidad me lleva, de nuevo, a replantearme la vida con cierta profundidad. Pero, lejos de dejarme llevar por el miedo a no llegar, el miedo a la carencia, descubro que lo vivo serenamente, con cierta «curiosidad» sobre qué carajo tiene preparado el Universo para mí en esta época tan turbulenta, y el tan cacareado cambio de ciclo en la Historia del Planeta y de la Humanidad a través del marco del año 2012.
En la práctica, he optado por enfocar mi energía al mantenimiento de la casona donde vivo (de ahí el título de la anterior entrada del blog), continuar en la difusión de información y estar atento a lo que se mueva alrededor mía en el escenario en que me muevo. Recientemente, he impartido una charla sobre vacunas («Vacunas: no es oro todo lo que reluce») a un grupo de crianza en Pamplona, estoy a la espera de lanzar la charla sobre «Fibromialgia», y trabajo en el guión del Curso sobre Inteligencia Emocional del que escribí recientemente.
Aprovecho para anunciaros que voy a organizar próximamente un nuevo Curso Básico de Diseño Humano, tal y como podéis ver en la siguiente presentación. Diseño Humano es una herramienta interesantísima de cara a nuestro propio conocimiento como seres humanos. En este momento, los maestros y las familias de la escuelita libre en la que colaboro (Tximeleta) están comenzando a solicitarme lecturas de los Diseños de los niños. Es una muy buena manera de aprovechar los recursos que tenemos a nuestro alcance para favorecer el desarrollo armónico de nuestros pequeños…
Y también que Genoveva Ros i Bodí va a realizar un Taller de Constelaciones Familiares el sábado 25 de Febrero en el Centro «El Arte de Vivir», en Pamplona. Una experiencia única para la que no hace falta ninguna experiencia previa. Veremos prácticamente, como siempre, cómo el Amor (con mayúscula) se las compone e ingenia para sanar al ser humano a través de sus propios Sistemas Familiares a los que ha venido a servir y a serles fiel. Muy recomendable.
En estos días, como casi siempre, he recibido mensajes de personas que comparten enlaces a vídeos interesantes. Xabi (gracias por compartir) me envió uno sobre «La Matriz de la Vida», documental en el que se van repasando otras maneras de afrontar la vida, la enfermedad, con las que coincido ampliamente (aunque siempre hay alguna particularidad en la que disiento pero eso me ocurre en casi todo lo que me toca vivir…)
Otro vídeo que vi ayer (gracias, Manolo) es del Dr. Wayne Dyer, el de los best-seller «Tus zonas mágicas» y «Tus zonas erróneas». Este vídeo al que me refiero, «El poder de la intención», bastante largo, también dice cosas interesantes…, aunque lo hace utilizando maneras de expresar muy americanas para el humanito afincado en España. Aquí os lo dejo…
El trasunto general de esta nueva forma de ver la vida tiene como núcleo común el Amor, la Confianza, la Aceptación…, sin lugar a medias tintas, sin dar paso a la duda; es un tirarse a nadar sin, a la vez, estar pendiente de la ropa en la orilla…
Y todo esto ¿por qué se está moviendo en estos momentos en la Humanidad? ¿Qué tiene que ver el dichoso 2012? Pues, todo forma parte de la misma cuestión, del mismo tema. También la situación que afecta a nuestro Sol y a todo su sistema planetario. Esto ya lo he comentado en otras entradas del blog, pero siempre es bueno repasar y recordar conceptos.
Según parece, nuestra estrella referente, el Sol, junto a todo su sistema planetario (la Tierra incluida), está envuelta en un movimiento cíclico de acercamiento y alejamiento del plano horizontal de la Galaxia, la Vía Láctea. Parece ser que estamos muy cerca de ese plano horizontal galáctico, una ubicación en la que nos estamos viendo bombardeados por todo tipo de radiaciones cósmicas, de gran agresividad (acordaos de esa imagen tan preciosa y, a la vez, tan impresionante en la que se ve cómo desde el centro de la Galaxia (un verdadero agujero negro) están emitiéndose unas «burbujas» de radiaciones potentísimas (rayos X y Gamma).
Es sabido que el Sol está generando variaciones en su propia vitalidad estructural, en base a ciclos de 11 años, aproximadamente, y estamos ahora en el ciclo solar número 24, y los científicos no se ponen de acuerdo en si se nos viene encima un máximo solar del carajo, con un efecto achicharrante para los planetas del sistema solar…, o se nos viene encima una nueva franja de tiempo similar a la pequeña edad de hielo que se vivió en este planeta durante los siglos XIV al XIX, con varios picos de mayor intensidad (el Mínimo de Maunder ocurrió durante el siglo XVII). Os dejo aquí una interesante intervención en un foro sobre el tema de una posible próxima glaciación.
El caso es que el ecosistema terráqueo no es impermeable ni permanece imperturbable a los acontecimientos cósmicos en los que estamos envueltos. Quiero recordar aquí que la NASA, en su día (y en este blog lo transcribí), comunicó a sus empleados la necesidad de estar alertas, preparados (no temerosos) ante una situación de carencia total de elementos energéticos en el planeta, intentando estimular a que sus empleados y sus familias pusieran en marcha procedimientos de cara a poder sobrevivir en esa situación con sus propios medios…
Durante esta última fase del ciclo solar se está comprobando que el Sol está despertando con un poder de emisión de plasma solar, de viento solar…, casi bestial. Hasta ahora no nos ha dado de lleno, pero no sería raro que, bien dirigidas esas emanaciones de plasma solar hacia nuestro planeta, generara desórdenes importantes por perturbaciones inmediatas de todos los sistemas eléctricos existentes… Sería previsible que los transformadores eléctricos y todos los sistemas con base eléctrica (desde los propulsores del agua de conducción, la red de distribución de alimentos, funcionamiento de hospitales, centrales nucleares…, y lo que se os pueda ocurrir) dejaran de funcionar. Se quemarían, literalmente, con lo que no habría repuestos en un montón de tiempo…
Sea lo que sea (aunque no se puede asegurar la probabilidad de que algo así ocurra), creo que nos va a tocar verlo y vivirlo en primera fila. ¿Cómo podríamos vivir ante ese tipo de situaciones, posiblemente catastróficas (cosechas vuelta al aire, enfermos sin fármacos, aguas y aire contaminados y otras penurias varias…). Mejor intentar no tener miedo e ir preparándonos para aprender a vivir en otras condiciones más «simples», más primarias, lejos de las tan cacareadas cifras de las «primas de riesgo» y lindezas semejantes que sólo interesan a los propios protagonistas mangantes que intentan esclavizar a la población, auténticos sostenedores del sistema social en el que vivimos…
¿Por qué no comenzar a vivir mirando sobre todo a lo más importante, las personas y la posiblidad de satisfacer nuestras necesidades más simples, más básicas; intentando relacionarnos con los demás como si fueran (que lo son) seres con los mismos derechos y en la misma situación que uno mismo, tan imperfectos como unomismo, intentando hacer a los demás lo que a nosotros nos gustaría que nos hicieran? (esto me suena a catequesis, pero es algo que es de sentido común y totalmente beneficioso para cada una de las partes intervinientes, ¿no?).
Cuando vi el vídeo que me envió Juan Carlos (gracias), lo primero que me pareció fue un nuevo vídeo sobre el «buenismo», algo «ñoño», «blandiblú»…; pero, si lo vemos desde la pureza, no lo veo nada mal para ir empezando a crear comunidad…, cada cual en donde vive. ¿Os parece digno de repetirlo en nuestras vidas?
Entre tanto, ¿qué mejor que cultivarse en los ratos libres con la música sinfónico-coral? Más adelante os contaré sobre mis andanzas cantarinas, que se presentan moviditas para Marzo y Abril.
Salud para ti y los tuyos.