Tú, yo y San Valentín
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Como cada año por estas fechas, surge el tema del amor, del enamoramiento, de los enamorados. Celebrar este día de San Valentín sigue siendo una creencia que se nos ha imbuido en nuestras mentes y, cómo no, en la actualidad, con tintes meramente comerciales.
Como ya es habitual en este blog, y como deferencia a las personas que prefieren escuchar a leer, voy a colgar a continuación el vídeo del texto.
Si nos detenemos un poco a revisar el tema, podemos ver que el amor hacia otra persona se ha hipertrofiado hasta la exageración. Y cualquier canción, y no sólo del género romántico es una viva demostración de esta realidad.
Eso de «no puedo vivir sin ti», «sin tu amor yo no soy nada»… son algunos ejemplos que me vienen a la cabeza, sin yo ser alguien que devore ni me sienta atraído por este tipo de canciones, ni mucho menos.
Tengo bastante claro que esa unión del amor a la sexualidad, al hecho del emparejamiento y/o a la construcción de una estructura familiar, la venida de hijos, etc… es una trampa. El amor es el amor, así como la sexualidad es la sexualidad, el emparejamiento es el emparejamiento, y la construcción de un hogar es la construcción de un hogar.
Otra cosa es que sería interesante (y humano) querer conseguir aunar esas cuestiones en la construcción de una única realidad… pero los seres humanos, en general, no hemos venido a vivirlo así, en un único paquete.
Desde la perspectiva de Diseño Humano, herramienta interesante donde las haya para alcanzar un grado de autoconocimiento, las personas tenemos un componente sexual, biológico, animal, así como una capacidad de vivir el Amor, así como la posibilidad de construir acuerdos que nos unan a otras personas.
Y cada una de esas cuestiones las podemos vivir de acuerdo o no respecto a nuestro programa particular, individual, el que hemos traído para experimentar en esta vida. La decisión de cómo hacerlo nos compete a cada uno, y para ello disponemos de un libre albedrío para acertar o fallar.
Dicen que el amor es ciego, pero lo que realmente (y más habitualmente) nos puede llegar a cegar es la pasión desaforada, la falta de filtros a la hora de actuar, a la hora de lanzarnos al mundo.
Cada cual tenemos nuestra forma peculiar de percibir la vida con sus experiencias y también nuestra forma de colocarnos en ella. Y ahí también está «la otra persona», envuelta en su propio proceso de autodescubrimiento. Y ahí es donde suele comenzar el follón.
Cada vez tengo más claro que el ser humano comienza a mirar a la otra persona demasiado pronto, sin haber echado una mirada más calmada hacia su propio interior y sin que haya generado un mínimo conocimiento consciente de su realidad como persona, como individuo. En otras palabras, sin madurar.
Diseño Humano es un instrumento adecuado para conseguir tener una cierta idea de qué hemos traído a este mundo, de cómo orientarnos a la hora de experimentar nuestra vida. En otras palabras: «cómo hemos venido a vivir» la vida.
Ya está bien de hacer caso a mensajes homogeneizadores de la realidad. Cada cual hemos venido con un programa diferente que nos puede llevar a vivir en desacuerdo con lo que impera, con el orden establecido.
Para saber de qué estamos hechos, con qué programa inicial venimos y lo interesante de explorarlo, experimentarlo, se puede bosquejar a partir de una descripción de esas herramientas o potenciales que nos capacitan para poder sacar ese provecho a la vida que todos anhelamos y que esperamos que, ilusoriamente, «nos caiga del cielo».
Si quieres acercarte a esa realidad que has venido a vivir, puedes pedirme (a través de este formulario de contacto o del tfno 633.215.355) una descripción individualizada de tus herramientas. Ésas que hacen de ti un ser excepcional, diferente a los demás. Ni mejor ni peor que otros seres humanos que te rodean y con los que compartes tu peregrinación por esta vida.
¿Y la pareja? Pues también tiene su propio programa de vida. Hacerle caso a nuestro propio programa de forma individual o no nos va a llevar por caminos diferentes, encuentros diferentes… y elecciones diferentes. Todo depende de ti y de cada cual.
Si quieres más información sobre el tema, puedes leer la entrada que hice hace ya un tiempo sobre este tema o ver el siguiente vídeo.
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Salud para ti y los tuyos