Foco de Atención

FOCO DE ATENCIÓN

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Cada día, los medios de comunicación dirigen nuestro foco de atención hacia dónde tenemos que mirar y construyen lo que hay que pensar sobre el tema que sea. ¡¡Cuánto más sobre la pandemia que nos azota!!

Os voy a dejar a continuación el texto que he escrito hoy para navarradigital.es.

Se puede comprobar, a nada que se mire en los medios de comunicación y las redes, el interés que está generando la distribución de las “vacunas milagrosas”. Y lo pongo entrecomillado porque los mismos productores de las mismas han dejado claro (para quien quiera comprender) la inutilidad de las mismas como elemento protector de la Covid-19.

Hasta la fecha, en ningún protocolo de vacuna se ha visto la finalidad de prevenir la enfermedad Covid-19. Y en ninguna de las vacunas que ya están usándose (y que no tienen la aprobación definitiva sino un permiso de uso por emergencia), repito, en ninguna se ha comprobado la eficacia a la hora de prevenir contagio-transmisión, ni se ha considerado (por imposibilidad técnica) el tiempo en que van a crear inmunidad, etc, etc.

Pero da igual: todos a ponerse la vacuna, como si fuera un mantra incuestionable. Y si a alguien se le ocurre anteponer un “pero”, ya es tildado de todo menos de bonito. Se pasan por el arco del triunfo que los dos primeros prototipos que han salido a la luz sean modelos experimentales cuyos primeros resultados mostraron un 50-80% de efectos adversos, aumentando en la segunda dosis…

¿Y en qué consistieron los más abundantes efectos adversos? Pues, además de reacciones locales en el punto del pinchazo (que me parece normal que suceda), muy frecuentes (lo dicen las propias empresas) cefaleas (dolores de cabeza), artralgias (dolores de articulaciones), mialgias (dolores musculares), fatiga, escalofríos, febrícula-fiebre… ¿Qué es esto? Ni más ni menos, tiene la forma de un cuadro leve pseudogripal; o sea, en estos momentos sería diagnosticado de Covid-19.

Total, que una gran mayoría de personas puede pasar un cuadro leve de Covid-19 tras vacunarse, sí que puede ser más transitorio en el tiempo que un cuadro Covid-19 puro, pero no hay que olvidar que partíamos de personas que no padecían de ese cuadro y que les ha sido provocado. Y, posiblemente, se librarían de pasar la Covid-19.

Una pregunta que se me plantea ante la realidad de esos estudios: si en los voluntarios sanos se provocó un porcentaje amplio de efectos adversos, ¿qué está pasando ahora que se está inoculando el mismo producto a personas de todo tipo, en gran parte abuelos con un estado frágil de salud? ¿Dónde están esos efectos adversos? ¿Han desaparecido por arte de magia?

Pues asumo que no. Se nos dice que ya hay un sistema de farmacovigilancia eficaz que recoge dicha información. Un sistema al que debemos dirigirnos la población y los médicos para comunicar reacciones que se hayan notado tras la toma de un fármaco (en este caso la vacuna). ¿Esto es suficiente? Un rotundo ¡¡no!!

Está muy comprobado que los sistemas de recogida pasiva de datos, como el nuestro (y el VAERS norteamericano) no son eficaces en absoluto. Como en otros temas, en España no he encontrado estadísticas sobre la eficacia de nuestro sistema, pero en el VAERS sí se ha visto en más de un estudio que se reflejan en él menos del 1% de las reacciones tras recibir el fármaco.

Hay también una referencia italiana, interesante, en la que se revisaron las posibles reacciones adversas proactivamente, o sea, que se les siguió la pista activamente desde los servicios sanitarios, y concluyeron con unos porcentajes mucho más amplios que los que tradicionalmente se nos dice por las autoridades sanitarias nacionales y supranacionales.

En esta revisión, vieron que hubo 992 efectos adversos entre los 2.149 niños a los que se vacunó con la MMRV (vacuna contra el sarampión, las paperas, la rubéola y la varicela) y con los que se concluyeron las tres semanas de seguimiento telefónico. Pero no toda notificación entra automáticamente como reacción a la vacuna, pues deben pasar por un filtro de la OMS para que puedan ser considerados como tales y también para la calificación de “graves”.

109 (11%) de esos 992 casos de reacciones adversas a la vacuna cuádruple vírica fueron catalogados como “graves”; es decir, mortales o potencialmente mortales; requiriendo intervención u hospitalización; o causando discapacidad o incapacidad persistente. Pero se tiene que pasar por un algoritmo de la OMS por el que el caso notificado se vincula o no a la vacuna recibida.

Curiosamente (me salían otros adverbios más consistentes pero he preferido emplear éste), dentro de los criterios de la OMS consta lo siguiente: sólo las reacciones que previamente se han reconocido en estudios epidemiológicos como causadas por una vacuna se clasifican como reacciones relacionadas con el producto de la vacuna. Las nuevas reacciones adversas graves que surgen después de la licencia “se etiquetan como muertes/eventos coincidentes o inclasificables”.

Es inaudito el descaro que se gastan a la hora de provocar la disminución en la incidencia de reacciones adversas a las vacunas.

Aun tras esta serie de trabas, la revisión italiana concluyó que 82 de 109 reacciones adversas graves mostraron una asociación causal “consistente con la inmunización con MMRV”. Esto se traduce en 38 eventos adversos graves por cada 1.000 niños inscritos, o uno de cada 26.

¿Estas cifras salen a la luz pública?, ¿se les informa a los padres de los niños de la posibilidad real de que ocurra algo de esto en sus hijos? ¿Saben en qué consiste eso que se llama “consentimiento informado”?

Los sistemas de notificación y control de reacciones adversas a fármacos, mundialmente, siguen apostando por dinámicas “pasivas”; quiero decir, que sean las propias personas (u otras en su representación) quienes tomen la iniciativa de cara a la notificación de posibles reacciones a los fármacos, en este caso vacunas.

A partir de ahí, con un número de reacciones ya disminuido, cercano al 1% de las reacciones reales, ya se encargarán de cribar las notificaciones y concluir cuál de ellas está relacionada o no con la vacuna en cuestión.

Y  puede pasar… lo que ya está ocurriendo. No sé si os acordaréis de un ginecólogo-obstetra norteamericano, de 56 años que murió en Florida de una Púrpura Trombocitopénica (de origen inmunológico) que le ocasionó una disminución brutal de plaquetas, con lo que le sobrevino una hemorragia cerebral fatal.

Pfizer, de primeras, negó la evidencia, aun cuando este tipo de cuadros sí han sido descritos como posibles efectos adversos a vacunas previamente (por ejemplo en la vacuna de la gripe). Y, al final, no ha engrosado la lista de efectos adversos porque los síntomas comenzaron más allá de tres días tras la vacuna.

¡¡Esto clama al cielo!! ¿Y podrán dormir por las noches con tranquilidad?

En los primeros días tras el inicio de la vacuna de Pfeizer-BioNTech, los CDC norteamericanos utilizaron una plataforma llamada “V-safe”, que genera un control mucho más inmediato y directo sobre las posibles reacciones a las vacunas. De esta plataforma sacaron las primeras cifras, llegando a mostrar un 2’3% de reacciones graves de entre la población vacunada.

¿Qué ha pasado para que ya no den cifras de esa plataforma (que es opaca, no se puede acceder libremente por la población) y continúen fijándose en las cifras del sistema VAERS, un sistema ineficaz que, repito por si alguien no se ha quedado con el dato, se calcula que sólo figuran el 1% de las reacciones adversas reales a las vacunas?

Ahora vamos a ver lo que está sucediendo en el mundo. Ojo, a través de lo que los medios nos muestran. Así como se ha llamado la atención en Noruega por una serie de muertes relacionadas temporalmente con la inoculación de vacunas en ancianos, personas ya débiles por definición, y se han cuestionado lo correcto o no de vacunar a este tipo de población, ¿qué ocurre en España?

Aparecen múltiples casos (en residencias de ancianos) en los que surge repentinamente un brote numeroso en lugares donde ya han pasado por la primera dosis de vacuna. Incluso, por ejemplo, en una residencia de la sierra madrileña, se llevó por delante a 11 de las 51 personas asiladas (todavía siguen otras cuatro ingresadas y 2 de ellas en situación crítica).

Pues aquí no pasa nada, y siguen con las vacunaciones tan tranquilamente.

Se están considerando posibles vías de cómo se pueden generar efectos adversos graves por la existencia de varios órganos diana: entre ellos, la mucosa vascular, el endotelio. Es en este tejido (repito, entre otros) donde se puede generar una reacción inmune y siguientes procesos inflamatorios, trombóticos y/o hemorrágicos. ¿Cuál puede ser el final de esto? Infartos de miocardio y cerebrales. ¿De qué se están muriendo estos abuelos?

¿Cómo es posible que un anciano que, aunque con sus achaques correspondientes se encuentra decentemente, a los pocos días de vacunarse le dé un “jamacuco” y muera? ¿Que a todos nos puede dar? Efectivamente, es así. Pero qué triste casualidad la que está ocurriendo en el mundo, y las diversas autoridades, tanto civiles como sanitarias, mirando como la vaca al tren

Bien, y si has llegado hasta aquí, te preguntarás a qué venía el título de este artículo. Fijaos si hay temas hacia donde derivar la atención… que ahora parece ser que lo único que importa es si alguien se ha saltado la cola y se ha vacunado antes de lo debido…

Y bueno, el asunto está que arde con que ya no vienen las vacunas prometidas en las cantidades apalabradas… (el viejo truco de la escasez para generar un aumento de la demanda) ¿Qué vamos a hacer ahora sin el “bálsamo de Fierabrás” quijotesco? Pues lo primero, dar permiso de aplicación (eso sí, de urgencia) a la siguiente actriz de reparto, la vacuna de AstraZeneca/Oxford, que aunque no tenga fiabilidad en personas de más de 55 años… no importa, es barata y se mantiene en un congelador normal.

Y si esto no funciona, lo tienen muy fácil: seguir haciendo PCRs “a destajo” sin disminuir sus umbrales de amplificación, seguir amontonando “casos nuevos” y, con los hospitales llenos con cuadros pseudogripales, volvernos a confinar… Esto roza lo criminal.

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Salud para ti y los tuyos

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10 comentarios

  1. También he quedado horrorizada por lo que cuenta de la vacuna MMRV en niños.
    Mi hijo tiene 5 años y a los 6 le toca la triple vírica y el recordatorio creo de la varicela (que no debería haber puesto).

    Es la misma vacuna de la que usted habla?Efectivamente no se pide ningún consentimiento. Sé que las vacunas, tienen aluminio, pero cerré los ojos y dejé vacunar a mi hijo de todo, por miedo, porque no me perdonaría que tuviese alguna enfermedad para la que hubiera vacuna. El sistema es así de cruel, culpabiliza a los padres. En cambio, cuando hay algún efecto adverso grave de las vacunas, nadie quiere saber nada, ni farmacéuticas ni médicos que no admiten la causalidad.

    Muchas gracias

    1. Hola, María.

      Efectivamente, se trata de la misma vacuna a la que me refería en el texto. El estudio es éste: https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6963278/

      Es claro que no soy yo quien te tenga que decir qué hacer con tus hijos. Eso es responsabilidad de cada cual. Lo único que es necesario para tomar decisiones responsables es información clara sobre lo que ocurre. Y eso, tristemente, no nos lo dan. El sistema médico y sanitario en general está impregnado respecto al “buenismo” de las vacunas, tanto en su necesidad, eficacia y seguridad. Y eso, así dicho en forma tan general, no es correcto. Digan lo que digan, se pongan como se pongan. Al menos, todavía conservo el sentido común para analizar datos.

      Lo que está ocurriendo ahora con las personas que están sufriendo procesos neurológicos, cardiovasculares, incluso muertes a los pocos días de haberse vacunado, es que son, a la vista de nuestras autoridades (tanto sanitarias como gubernamentales) “tristes coincidencias”. No se investiga las causas últimas de esos procesos. No interesa. Todo se intenta ocultar. Las redes muestran casos horrorosos de personas con disquinesias posteriores a las vacunas Covid. ¿Que son pocos? ¡¡Claro!! Pero es que antes de las vacunas ¡¡estaban sanas!!, como tú y como yo.

      Te deseo lo mejor, decidas lo que decidas hacer. Pero también, decidas lo que decidas, por favor, deja de preocuparte y ocúpate de disfrutar de tus hijos y de la vida.

      Salud para ti y los tuyos.

  2. Hola Silvano.
    Soy una bióloga de Mallorca, ya seguía un poco su blog antes de la pandèmia. Ahora también.
    Parece alucinante que la VAERS solo detecte un 1% de los casos, ya que siendo así son bastantes 501 muertes en EEUU, también documentados por el CDC.

    https://cienciaysaludnatural.com/501-muertes-10-748-otras-lesiones-reportadas-despues-de-la-vacuna-covid-datos-del-los-cdc/

    Aparte de este médico de EEUU de 56 anos, hay 4 sanitarios Italianos muertos de aproximadamente 40 años por infartos, casualmente después de la vacunación. sale en periódicos italianos pero no en otros ni en TV, como tampoco la enfermera portuguesa de 41 años muerta igualmente.

    La verdad es que me preocupa bastante toda esta situación, soy profesora tengo 40 años y solo veo una solución o vacuna o pasar el covid.

    Entiendo todo lo que dice Médicos por la verdad, la Dra Teresa Forcades, pero lo único que no entiendo es que solución o alternativa hay a todo esto. A la mínima que no hay restricciones el sistema de salud hospitalario se colapsa. Tengo un conocido en una UCI y nos contaba que estan agotados, uci triplicada…todo esto no pasaba con la gripe y tampoco veías a gente joven tan afectada. El dilema es grande y no me apetece vacunarme pars formar parte del experimento.

    Gracias

    1. Hola, María.

      Entiendo tu preocupación. Sin ser gallego, me sale preguntarte: ¿qué haces cada año para no pasar una gripe, una tuberculosis, o cualquier otra enfermedad contagiosa aparentemente respiratoria? Yo hago vida normal y tener el sentido común suficiente para no exponerme al contagio de personas enfermas (no me refiero a la repentina aparición en escena, el exabrupto de los “enfermos asintomáticos”).

      Fíjate en la siguiente tabla: https://silvanobaztan.com/wp-content/uploads/2021/02/MORTALIDAD-COVID-19-EN-ESPANA-POR-EDAD-Y-RIESGO.jpg

      Si miras objetivamente esos datos, con 40 años y sin comorbilidades, ¿qué crees que debes hacer? ¿de qué te tienes que preocupar? ¿Y si miras los datos de los niños? ¿crees que te debes preocupar demasiado?

      Con esto no estoy negando que haya casos en UCIs, que haya muertes… pero construir la alarma del miedo que han construido y siguen haciéndolo, me parece muy poco científico. Siempre repito que las decisiones en el ámbito de la salud pública se toman desde las cifras globales. Siempre va a suponer un gran drama que una persona joven tenga que pasar por este tipo de situación, pero sucede en casos muy esporádicos (y, para mí, siempre con alguna causa detrás que lo motiva). La enfermedad no aparece porque sí, pero esto es otro cantar para otra ocasión

      La dicotomía que expones de vacunarse o pasar la Covid no es tal. Puedes tranquilamente no vacunarte y no pasar la Covid. Como puedes no vacunarte de gripe y no pasar la gripe, como puedes no vacunarte de tuberculosis y no pasar la enfermedad… Estamos llegando a pensar como consecuencia de la desinformación que nos han metido en la cabeza día tras día. La misma OMS retiró de su definición de inmunidad grupal o de rebaño la posibilidad de llegar a ella pasando por la propia enfermedad (o sea, la forma natural de hacerlo)… dejando sólo la posibilidad (única) de llegar a dicha inmunidad a través de la vacunación masiva.

      Estamos viviendo en una situación delirante, y cada vez debemos realizar un mayor esfuerzo para no dejarnos llevar por esa inercia fatal.

      Muchas gracias por tu comentario-pregunta.

      Salud para ti y los tuyos.

      1. Gracias Silvano por tu respuesta.
        Que hago para no coger la gripe? Pues me lavo las manos en invierno siempre antes de comer, sagrado. Así que no cojo la gripe des de los 23, tengo 40. Me refería también porque el SARS cov 2 es bastante más contagioso que la gripe.

        Claro que sí miro esta tabla no me tengo que preocupar demasiado, pero es que en los medios salen otras tablas, como está de abajo, donde hay un 0.8% de mortalidad en los 40 años, la Dra Karina Acevedo decía el 0,4%. Y luego crece hasta en los 70-80 años con 15-18% mortalidad.

        https://es.statista.com/estadisticas/1125974/covid-19-porcentaje-de-fallecimientos-por-edad-y-genero-en-espana/

        Así que la tranquilidad de consigue según que tabla miremos.

        Aún así, está claro que hay un interés de vacunación masiva, ya se están vacunando embarazadas y la querrán poner a niños. Lo que más preocupa es que gente que estaba bien y sana después no lo esté por las vacunación.

        Saludos y gracias

        1. Hola, María.

          En parte tienes razón en cuanto a que no todas las tablas dan los mismos datos exactos. La que me has puesto es de mayo 2020, totalmente desfasada. Te traigo aquí la última que he visto ahora mismo del RENAVE (Ministerio de Sanidad) con fecha 10 febrero 2021: https://silvanobaztan.com/wp-content/uploads/2021/02/MORTALIDAD-POR-CORONAVIRUS-EDAD-ESPANA-10-FEBRERO-2021.jpg

          A partir de ahí, tú eres libre de enfocar tu atención a esos escasos porcentajes de defunciones… o a los 99’9…% de personas que sobreviven a la Covid-19. Si te sigues fijando en los porcentajes de defunciones para articular tu vida cotidiana, creo que tienes un problema con el miedo en la vida. No es nada grave pero sería interesante darle una vueltita para que puedas abrirte a la vida sin temor, sin tener que agobiarte.

          Salud para ti y los tuyos.

  3. Excelente! Você colocou em palavras corretas,tudo que vemos e pensamos a respeito desses absurdos. A vida “pandemica” segue, as decisoes sem nexo tambem,e ainda assim, muitos ckntinuam dormindo profundamente.
    Preguiçosos demais para questionar ,preferem aceitar o pacote a muito preparado para enrolar bobocas. Deus nos ajude!

  4. Le sigo habitualmente porque siempre da información de interés. Estoy indignado con tantas cosas en estos tiempos, que sería difícil enumerarlos, pero en este momento lo más grave es la tremenda carnicería que se está haciendo con la vacunación de los ancianos. Y además parece que el atropello quedará impune. Hay que pararlo y no sé cómo. Impotencia

    1. Hola, Manuel.

      Creo que cualquier ser humano con un poco de información puede sentir lo mismo que tú y yo… pero tristemente no es así. Parece que estas muertes se consideran totalmente normales… por la edad, cuando parece que no se cuestionan para nada el antecedente reciente de una vacunación. Está asimilado totalmente por la sociedad que la vacuna no puede causar este tipo de efectos, cuando eso no está absolutamente probado.

      No podemos sino continuar hablando lo más en voz alta que podamos, cada cual en su entorno.

      Salud para ti y los tuyos.

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