Navidad y Familia

NACIMIENTO DE NAVIDADEn nuestra cultura, estas fechas del año las relacionamos con la familia. Y, como en todas la culturas, desde las más primitivas a las más actuales, más o menos soterradamente, hacemos gastos extras en nuestra cesta de la compra para celebrar estas fechas.

Ya hice referencia a comienzos de año, en esta entrada referida al tiempo, de las diferentes fechas en las que los humanos celebramos los ciclos anuales por los que van trascurriendo nuestras vidas. Como no se trata de repetirse, ahora me quiero referir al tema estrella de estas fechas: la familia.

En la cultura cristiana, de donde procedemos en estas latitudes, hay un dicho que dice: «familia que reza unida, permanece unida». Bueno, en estos momentos, con el índice de practicidad que se vive en el cristianismo actual, no sé si la frase puede aplicarse fácilmente en lo cotidiano…

Lo qué sí veo en consulta, cuando hablo con las personas que acuden, es la no despreciable  polarización con la que vivimos la Navidad: a unos les encanta este ambiente festivo, de reunión familiar… y a otros les gustaría que hubiera un tupido velo que las hiciera desaparecer de la faz de la Tierra.

DISCUSIÓN NAVIDEÑA

(imagen obtenida de aquí)

Tristemente, en muchos casos las reuniones familiares, cuñados incluidos, hacen revivir situaciones que no han funcionado como era deseable como cimientos sólidos en nuestra construcción infantil. En muchas personas, en las que el destino les ha forzado a pasar por experiencias familiares poco gratificantes, estas fechas generalmente provocan estados de tensión que surgen sin pretenderlo…

Es como si las personas volviéramos a sintonizar con situaciones y vivencias que han perdurado en nosotros sin quererlo; y, en lugar de vivir como adultos en la vida actual, volvemos a colocarnos como esos niños sufrientes, sin posibilidad de salirnos de ese papel.

Todo ello es modificable, por supuesto. Sin poder llegar a anular la propia historia, la solución pasa por cambiar el guión de lo que está grabado en el inconsciente de la persona sobre lo allí ocurrido… Para ello, claro, es tomar consciencia de esa realidad… y lo que toca ahora es ponernos en paz con nuestro pasado y empoderarnos en nuestro presente para poder disfrutar de lo que ahora poseemos como adultos y queramos perpetuar.

MESA NAVIDEÑA

Felices fiestas y próspero año.

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Salud para ti y los tuyos.

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